Registraduría extiende hasta 2027 la nacionalidad para niños nacidos en Colombia, hijos de padres venezolanos
Bogotá, 10 de septiembre de 2025. — La Registraduría Nacional del Estado Civil anunció la prórroga de la medida excepcional “Primero la Niñez”, que garantiza automáticamente la nacionalidad colombiana a niñas y niños nacidos en el país de padres venezolanos, evitando su apatridia. Esta extensión, oficializada mediante la Resolución 9820 de 2025, estará vigente desde el 21 de agosto de 2025 hasta el 2027.
Contexto y alcance
Desde su adopción en 2019 con la Resolución 8470, la medida se implementó inicialmente de manera retroactiva para los niños nacidos entre enero de 2015 y agosto de 2019, quienes anteriormente tenían la anotación “no válido para demostrar nacionalidad” en sus registros civiles. Esta primera fase benefició a más de 25.800 menores, equivalentes al 35 % del total identificado como apátridas.
Entre agosto de 2019 y marzo de 2025, alrededor de 94.305 niños y niñas nacidos en Colombia de padres venezolanos obtuvieron la nacionalidad, gracias a esta disposición.
En total, desde su implementación, más de 139.000 menores han recibido la nacionalidad colombiana a través de esta herramienta jurídica.
Prevención de la apatridia como prioridad
La medida está fundamentada en un concepto técnico del Ministerio de Relaciones Exteriores y en recomendaciones de organismos internacionales y académicos, incluyendo al Banco Mundial, la Universidad de los Andes, la Fundación Ideas para la Paz (FIP) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Su objetivo principal es prevenir la apatridia —la situación en la que un menor no posee ninguna nacionalidad reconocida— y garantizar los derechos fundamentales consagrados para la infancia, como el acceso a la identidad, la educación y la protección social.
Un paso firme en favor de la infancia migrante
La prórroga de “Primero la Niñez” refuerza el compromiso del Estado colombiano con la inclusión social, la equidad y la protección de los derechos de la niñez migrante. Esta medida sigue siendo una herramienta eficaz frente a las diversas barreras que aún enfrentan las familias migrantes —como la limitada presencia consular, la exigencia de documentos difíciles de obtener o los costos de trámites legales—, especialmente en regiones con alta concentración de población venezolana como Norte de Santander, Santander, La Guajira y Antioquia.